Disfruto de la atención íntima de mis primos durante las sesiones de auto-placer

Siempre he sido una gran fanática del auto-placer, y mi prima lo sabe.Le encanta unirse a mí en mis momentos íntimos, y he crecido para disfrutar de su compañía.Un día, estábamos pasando el rato cuando ella decidió meter las cosas en una muesca.Empezó a bailar sensualmente, quitando su ropa con burlas, dejando ver sus impresionantes curvas.Me prendí al instante.Cuando se arrodilló, se llevó mi polla dura a su boca, dándome la mejor mamada que he tenido.La vista de su jugoso culo rebotando mientras me cabalgaba fue suficiente para volverme loca.Cambiamos de posición, con ella agachada por detrás, permitiéndome penetrar su apretado culo.El placer fue intenso, y ambos perdimos el control.Al terminar, nos acostamos allí, basándonos en el brillo posterior de nuestra pasión compartida.Es un tabú, pero es algo que ambos anhelamos.Nues sesiones íntimas se han convertido en un ritual secreto, añadiendo picante a nuestras vidas.